Cambiar de coche cada pocos años puede parecer un lujo inalcanzable, pero, ¿y si te dijera que no es tan complicado como parece?
Seguramente estés pensando en el elevado coste de tiempo y dinero de un cambio de automóvil. Seamos honestos, esa es la barrera más común que enfrentamos al considerar un cambio de este tipo. Sin embargo, esto ya no es un problema gracias al renting de coches.
El renting te da la libertad de cambiar de coche cada pocos años sin tener que preocuparte por los costes que normalmente tendrías que enfrentar si fueras propietario. De hecho, al optar por el renting sin entrada, podrías llegar a ahorrar una buena suma de dinero.
¿Cómo es esto posible? Bueno, eso es precisamente lo que vamos a analizar en este artículo. Así que te invitamos a quedarte un rato con nosotros, ya que te mostraremos cómo hacer de tu sueño de cambiar de vehículo una realidad económica que además no te traiga complicaciones.
Los problemas al cambiar de coche cuando lo tienes en propiedad
No hay duda de que ser dueño de tu propio coche es una sensación agradable. Es tuyo, lo pagaste y te lleva de un lugar a otro. Sin embargo, ser propietario de un coche trae también consigo una serie de dificultades cuando piensas en cambiarlo.
Para empezar, está el tema de la depreciación. El coche que adquiriste, tan brillante y nuevo, pierde valor con cada kilómetro recorrido. Cuanto más tiempo lo tienes y más lo usas, menor es su precio de mercado.
Además, si decides vender un coche para cambiarlo por otro, es muy posible que tengas que asumir una pérdida significativa. El valor que pagaste inicialmente, no vas a poder reingresarlo, eso es seguro.
Y por si todo lo anterior no fuera suficiente, también está el estrés de vender tu antiguo coche para conseguir uno nuevo. Encontrar un comprador, negociar el precio y todo el papeleo que conlleva, es algo que frena a muchas personas de darse el gusto de un cambio de vehículo.
¿Por qué el renting es la opción más económica para cambiar de coche cada pocos años?
Un contrato de renting es básicamente un método de alquilar un coche a largo plazo. Pagas una cuota mensual y a cambio, puedes conducir un coche sin preocuparte por los costes adicionales. Si te encanta la idea de cambiar de coche cada pocos años, el renting es tu mejor aliado, veamos por qué.
Piensa en la depreciación del valor del coche que mencionamos antes. Con el renting, eso ya no es un problema. No importa cuánto pierda de valor el coche, puesto que no tendrás que amortizarlo, sino simplemente devolverlo cuanto termina tu contrato de renting.
Los costes de mantenimiento, seguros y reparaciones ya están incluidos en esa cuota mensual. No más sorpresas desagradables en el taller ni en pólizas de seguros que suben de precio cada año.
Si te preocupa el papeleo de la venta, con el renting te lo puedes ahorrar. Cuando termina tu contrato, simplemente devuelves el coche y si quieres, puedes elegir otro. ¡Así de sencillo!
Por tanto, si lo que quieres es disfrutar de un coche nuevo cada pocos años sin arruinarte en el intento, el renting es si duda la mejor alternativa. Pero además esto no queda ahí, ya que si quieres ahorrar aún más dinero puedes recurrir al renting de coches de segunda mano.
Los pasos para el cambio de un vehículo mediante un contrato de renting
Si estás pensando que el renting suena como algo complicado, tenemos buenas noticias para ti. En realidad, el proceso para cambiar de coche mediante un contrato de renting es bastante sencillo.
Como primer paso, tendrás que elegir el coche que quieres. Puedes hacerlo desde la comodidad de tu sofá, ya que disponemos de un catálogo online con una gran variedad de modelos.
Después, tendrás que definir los términos del contrato de renting, lo que incluye aspectos como la duración del propio contrato y los kilómetros que planeas recorrer cada año. No te preocupes, estos términos son flexibles y se pueden ajustar a tus necesidades.
Recuerda que el renting es una responsabilidad financiera. Es más fácil de manejar que un préstamo para la compra de un coche, pero sigue siendo un compromiso que tendrás que cumplir. Así que antes de firmar, comprueba que puedes afrontar la cuota mensual sin problemas.
Lo siguiente es esperar a que se apruebe tu solicitud de renting, lo que generalmente llevará solo un par de días y finalmente, una vez aprobado tu contrato, solo tienes que esperar a que te entreguemos el coche.
La mejor parte es que cuando tu contrato de renting finalice, podrás repetir el proceso y cambiar a otro coche nuevo, de forma rápida, sencilla y sin dolores de cabeza.
¿Tienes más dudas? pues ponte en contacto con nuestros expertos y te daremos atención personalizada sin compromiso.