El Skoda Yeti es un coche de dimensiones contenidas y aspecto de todocamino que tiene ciertas aptitudes para circular por algunos lugares fuera de carretera. Skoda comenzó a venderlo en septiembre de 2009 y lo renovó recientemente en enero de 2014. Con la llegada de esta última actualización, el Skoda Yeti se ha estado comercializando hasta 2017, fecha en la que se ha puesto a al venta e Karoq.
No obstante y hasta que eso ocurra, vamos a centrarnos en el Skoda Yeti de 2009. Lo primero que hay que señalar es que este modelo ya no está a la venta como coche nuevo. Por tanto, si se desea adquirir tiene que ser dentro del mercado de segunda mano.
Cuando Skoda lanzó el Yeti en 2009, desde aquí pensamos que tuvo cierto carácter de fabricante visionario. Entre otras cosas porque, por sus dimensiones y carácter, se enmarcaba dentro de una categoría (la de los SUV urbanos) que de hecho todavía no estaba creada. Fue Nissan, un año después (en 2010), quien inauguró prácticamente el segmento de los SUV urbanos con el Nissan Juke. Sin embargo, tal y como decíamos anteriormente, Skoda ya llevaba un año comercializando el Yeti.
Quizás, lo que Skoda no supo hacer bien con este modelo fue crear un diseño bonito. Aunque el tema de la estética es muy personal, todas las personas a las que preguntas opinan que el Yeti no es excesivamente atractivo. Y esto es lo que le ha mermado en las ventas desde el inicio. De hecho, mientras que los responsables de Skoda esperaban vender cerca de 3.500 unidades del Yeti al año, la realidad fue que no sobrepasaron nunca las 2.000 unidades al año. Quizás en 2015, esta cifra llegue a sobrepasarse gracias a los cambios introducidos en 2014 y a la reducción de precio ya que está muy cerca el modelo de 2016.
Sin embargo y a pesar de este bajo nivel de ventas, desde aquí (si nos olvidamos de su diseño) os podemos asegurar que es un buen coche y con cierta aptitud campera.
Como os decíamos anteriormente, el Skoda pertenece a la categoría de SUV urbanos o todocaminos urbanos. Se trata de un segmento en el que la competencia es muy dura y amplia. En concreto, como rivales del Skoda Yeti podemos encontrar a los siguientes modelos: Chevrolet Trax, Fiat 500X, Ford EcoSport, Honda HR-V, Mazda CX-3, Nissan Juke, Opel Mokka, Peugeot 2008, Renault Captur y Suzuki Vitara, entre otros.
Continuando con sus medidas, el Skoda Yeti presenta una longitud de 4,22 metros, una anchura de 1,79 metros, una altura de 1,69 metros y una distancia entre ejes de 2,57 metros.
Con estas dimensiones podemos afirmar que estamos ante uno de los modelos más grandes de la categoría. Por ejemplo, el Yeti es más largo que el SsangYong Tivoli (4,20 metros), Suzuki Vitara (4,17 metros), Peugeot 2008 (4,15 metros), Citroën C4 Cactus (4,15 metros), Nissan Juke (4,13 metros) y Renault Captur (4,12 metros). Por el contrario, existen otros rivales que son más grandes que el Juke: Opel Mokka (4,27 metros), Mazda CX-3 (4,27 metros), Chevrolet Trax (4,24 metros) y Fiat 500X (4,24 metros).
A esta buena longitud también podemos añadir que el Skoda Yeti es uno de los modelos más anchos y altos de la categoría. Con sus 1,79 metros de anchura y 1,49 metros de altura, pocos rivales le superan.
Con todo ello podemos afirmar que el Skoda Yeti presenta una de las mejores habitabilidades del segmento. Delante, por ejemplo, tiene una anchura de 137 centímetros (que no está nada mal) y una altura libre al techo de hasta 107 centímetros, lo que supone el récord del segmento. Por su parte, detrás comprobamos que presenta una anchura de 136 centímetros (muy buena medida) y una altura de 99 centímetros (también una excelente medición).
Es decir, el Skoda Yeti es probablemente el mejor SUV urbano por habitabilidad. Lástima que, en cambio, la plaza trasera central no sea muy ancha y que el túnel central también mermen la comodidad de una quinta plaza. Pero salvo por esos dos detalles, la habitabilidad es muy buena.
Otra virtud del Skoda Yeti es su maletero. Con una capacidad de 405 litros, el Yeti presenta casi el mejor maletero de la categoría. De hecho, tan sólo le supera el SsangYong Tivoli, que ofrece 423 litros. Sin embargo, el resto de rivales está por debajo en lo que a capacidad del maletero se refiere: 2008 (338 litros), Citroën C4 Cactus (348 litros), Mazda CX-3 (350 litros), Fiat 500X (350 litros) y Opel Mokka (356 litros) y Renault Captur (377 litros).
A ello hay que sumar una buena configuración de los asientos que, gracias a su sistema VarioFlex, permite desmontar los asientos posteriores para alcanzar una capacidad máxuma de 1.760 litros.
Otra de las virtudes del Yeti, junto a su buena habitabilidad, es que cuenta con una razonable distancia libre al suelo (18 centímetros) y que, además, ofrece versiones más urbanas con tracción 4×2, pero también variantes más camperas con la posibilidad de contar la tracción total 4×4.
En cuanto a la gama del Yeti, inicialmente está disponible con cinco motores: dos gasolina (1.2 TSI de 105 CV y 1.8 TSI de 160 CV) y tres diésel (2.0 TDI CR 110CV, 2.0 TDI CR 140 CV y 2.0 TDI CR 170CV). La tracción delantera está vinculada con las mecánicas menos potentes, mientras que la tracción total o 4×4 se puede escoger en todos menor en el 1.2 TSI de 105 CV.